Ayer domingo tuve la ocasión de visitar el Pozo Sta Bárbara, conocido por los locales como Pozu la Rebaldana, localizado en la población que lleva su mismo nombre, La Rabaldana, en el Valle de Turón.
Este pozo minero, junto a otros tres monumentos, Castillo de Ucero en Soria, Retablo de Belén en Laredo y Retablo mayor de la iglesia de San Pablo en Zaragoza, han sido seleccionados por el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte este año para llevar a cabo una rehabilitación profunda. El próximo 26 de octubre finalizará el programa de visitas guiadas que viene realizándose durante todo el verano para dar a conocer el proyecto de restauración.
Permaneció abierto durante más de medio siglo, hasta 1994. Es en el año 2010 donde forma parte de la lista de Bienes de Interés Cultural (BIC), siendo el primer elemento minero declarado como tal. Un inicio en el que cuatro años más tarde se incluye el castillete de la mina de Arnao, el Pozo de San Luis, en la cuenca del Nalón, entre otros.
La cuenca minera asturiana de los Valles del Caudal y del Nalón, forman el conjunto carbonero más importante y explotado de España. Por tanto su riqueza patrimonial es indiscutible.
Un territorio donde se desarrolló una intensa actividad industrial y con ello una manera de vivir, de sentir y de pensar. Pude escuchar de primera mano, asistentes que como yo realizaron la visita pero que desde luego la enriquecieron con sus experiencias como mineros de este pozo que ahora yace en silencio.
Santa Bárbara, patrona de las tormentas, artilleros y también de los mineros; una canción asturiana narra la historia real de una de tantas desgracias que han sucedido en las cuencas . Un himno que los mineros usan el día de su fiesta y en otras ocasiones especiales.
La Aldea Perdida, del escritor Palacio Valdés, recoge la transformación que sufre el paisaje con la llegada de la minería en su concejo natal de Laviana.
Resistencia minera, un libro – dvd de Javier Bauluz y Marcos Martínez recogen los encierros del verano del 2012, las reivindicaciones sobre el futuro de la minería, la marcha negra……
Pequeñas reseñas de identidad de un territorio que camina hacia un futuro incierto. Se espera que el próximo 2015 este Pozo quede en su práctica totalidad restaurado. Será el Ayuntamiento el encargado de gestionar este conjunto industrial, cuyo fin es el de albergar un espacio museográfico.
Confío que la inversión que conlleva esta rehabilitación de sus frutos en un paisaje verde con un tono gris.